24 abr 2014

24/04/14 - El plan de lucha de los docentes universitarios

Desde el 5 de marzo de este año, los docentes universitarios nucleados en la Conadu Histórica, junto a la oposición de la Conadu, hemos llevado adelante seis días de paro, movilizaciones y la instalación de una carpa frente al Ministerio de Educación, además de participar masivamente del paro nacional del 10 de abril con piquetes y movilizaciones. En Tucumán, San Juan y Mendoza las medidas fueron más prolongadas aún.

A pesar del incremento del costo de vida en un 40 por ciento nuestros salarios siguen con “el precio viejo” fijado en abril de 2013, que pretenden congelar hasta julio.

Los rectores y el gobierno pretenden que este ajuste se transforme en “estructural”. Por eso, junto a todas las burocracias sindicales, pretenden la firma de un CCT que impone los convenios por cada una de las 49 universidades dividiendo y debilitando el movimiento docente que conforman 150 mil trabajadores.

El objetivo del convenio por universidad es mantener todas las formas de precariedad laboral que imperan en la universidad. De suscribirse tendrían fuerza de ley el trabajo gratuito (20 mil docentes), los interinatos eternos (100 mil docentes), los docentes contratados “a término”, el monotributismo y toda otra forma de contratación flexible (más de 10 mil docentes).

Como frutilla del postre estarían excluidos de este convenio a la baja los docentes de posgrado, los ayudantes alumnos y los docentes que las autoridades universitarias se nieguen a ratificar. En lo que hace a los preuniversitarios se los incluye como anexo y con un escalafón que rompe la unidad con los docentes universitarios.

La dirección de la Conadu Histórica muestra, cada vez más, claramente su voluntad de acompañar con su firma este convenio. Lo fundamenta en la tesis de que “el peor convenio es el que no existe”, aludiendo a la situación de enorme precariedad de la docencia universidad que carece, a diferencia del conjunto de los trabajadores, de un convenio colectivo que contemple sus derechos.
Contra esta tesis, la Agrupación Naranja respondió que “el peor convenio es el que legaliza la precariedad laboral, el trabajo gratuito y la fragmentación de los trabajadores”. En la última asamblea de la AGD, la agrupación Docentes x el Cambio (Marea popular, Cauce) fueron voceros de los argumentos del oficialismo de la Histórica.

La asamblea de AGD-UBA ha rechazado la firma de este convenio y ha resuelto presentar una contrapropuesta y continuar las negociaciones mientras se exige un inmediato aumento salarial de emergencia. La Agrupación Naranja ha lanzado una campaña por la convocatoria y autoconvocatorias a asambleas en todas las unidades académicas y en todas las universidades, con un plan de lucha general convocado por un congreso abierto de toda la docencia, que luche para imponer la estabilidad laboral de todos los docentes.

Antonio Roselló